La SDMA es un biomarcador renal cuya concentración en la sangre habitualmente se incrementa antes que otros parámetros renales tradicionales, por lo que ayuda a detectar antes la pérdida de la función renal^1,2,5. La SDMA puede ser menos influenciable por factores, tales como la dieta y la masa muscular, y proporciona información adicional fiable sobre la función renal^3,4.

La SDMA refleja otros ocho estados de enfermedad

La SDMA añade otra valiosa herramienta a su equipamiento para contarle una historia sólida sobre la salud renal de un paciente, convirtiéndose así en un aspecto esencial de los diagnósticos de cribado.

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Hipertiroidismo

Mediante la incorporación de la SDMA en otros diagnósticos renales se puede añadir un componente importante a su diagnóstico de hipertiroidismo. Recuerde que la ERC suele presentarse con más frecuencia en gatos de mayor edad y que el hipertiroidismo es la endocrinopatía más común observada en esta población. La evaluación conjunta de ambos puede proporcionar una mejor comprensión clínica de ambas afecciones y facilitar, por ende, una atención individualizada.

Asimismo, diversos estudios han demostrado que en el hipertiroidismo hay factores extrarrenales que afectan moderadamente a la creatinina, por lo que reflejará en menor medida la función renal por la reducción de la masa muscular durante la enfermedad^11-16. La SDMA, que se ve menos afectada por la masa muscular magra suele ser, con frecuencia, una medida indirecta de la tasa de filtración glomerular (TFG) más fiable que la creatinina en gatos con hipertiroidismo^12,15.

Enfermedades transmitidas por vectores

En pacientes caninos que han dado positivo a las pruebas de exposición a una enfermedad transmitida por vectores es importante realizar un perfil bioquímico que incluya una evaluación sólida de los riñones. La SDMA, junto con otros biomarcadores renales, puede indicar una disminución temprana de la tasa de filtración glomerular (TFG) y detectar un daño renal secundario^19,20.

De la misma manera, los animales con una concentración elevada de SDMA que vivan en zonas endémicas o con una posible exposición deben someterse a pruebas de enfermedades transmitidas por vectores como parte de un estudio de enfermedad concurrente.

Es aconsejable realizar pruebas del estado de salud para el seguimiento a largo plazo de los perros con exposición conocida a una enfermedad transmitida por vectores; además, este hecho podría llevar a la identificación temprana de la ERC en la población expuesta.

Hipertensión sistémica

Medir la SDMA en pacientes con hipertensión sistémica puede ayudarle a detectar una enfermedad renal en fase inicial o un daño secundario en el riñón debido al aumento continuo de la tensión arterial. La enfermedad renal está estrechamente relacionada con la hipertensión. La insuficiencia renal no solo produce hipertensión (debido a la función que los riñones desempeñan en la regulación de la tensión arterial), sino que también puede causar la enfermedad renal. Una tensión alta continua puede dañar los órganos diana, lo cual significa daños en los riñones, los ojos, el cerebro y el sistema cardiovascular, entre otros⁸.

Síndrome cardiorrenal

El síndrome cardiorrenal es un concepto utilizado para referirse al espectro de trastornos en los que la disfunción de un órgano puede contribuir a la disfunción de otro. Debido a que la compleja dinámica del sistema cardiovascular se solapa con la del sistema renal, incluir la SDMA en el perfil bioquímico de un paciente ayudará a los veterinarios a identificar este trastorno y permitirá una intervención precoz, en caso de estar justificada⁸.

Obstrucción del tracto urinario inferior

La obstrucción del tracto urinario inferior es una de las principales urgencias urológicas pequenos animales. La retención de orina que se produce con la obstrucción uretral ejerce presión en los riñones, pudiendo ocasionar un daño renal agudo. La SDMA ayuda en la evaluación inicial anestésica como parte de una intervención de urgencia, así como para el seguimiento mediante la diuresis y la revisión del paciente después del alta. Durante la emergencia, la hospitalización y el seguimiento, es extremadamente importante tener un valor de referencia del impacto que tendrá en los riñones. La evaluación de la SDMA también puede contribuir a entender la recuperación de la TFG en cada una de estas fases¹⁷.

Sepsis

La prueba de SDMA puede aportar información sobre si los pacientes con sepsis/síndrome de respuesta inflamatoria sistémica (SIRS, por sus siglas en inglés) sufren un impacto agudo en la función renal y sobre la gravedad del daño ocasionado. La sepsis en animales está asociada a un daño agudo en los riñones del paciente¹⁸. Un estudio realizado en 2015 determinó que el 12 % de los perros con sepsis de origen abdominal sufrieron daño renal agudo provocado por la sepsis; asimismo, demostraron que es un factor de mortalidad importante⁹.

La detección a tiempo de los daños agudos conlleva una atención concreta y mejora así las posibilidades de supervivencia del paciente. La SDMA (como marcador de la TFG) puede ayudar a reconocer el deterioro de la función renal y debe tenerse en cuenta en los pacientes de urgencias con sospecha de sepsis o de inflamación aguda¹⁸.

Cáncer

Comprender perfectamente la función renal al diagnosticar y tratar a los pacientes con cáncer es importante para minimizar los daños a largo plazo y ofrecer a su paciente una atención óptima. En los pacientes con cáncer, la SDMA puede detectar la reducción de la TFG antes que los marcadores tradicionales, como la creatinina y el BUN, por lo que puede desarrollar un papel independiente en la patogénesis y el proceso de la enfermedad⁶.

La identificación precoz de la disfunción renal implica:

• La detección de los efectos paraneoplásicos en los riñones de determinados tipos de cáncer que influyen en el tratamiento a elegir.
• La posibilidad de infiltración del tejido renal por un tumor maligno, justificando así una estadificación más agresiva (p. ej., ecografía, aspiración con aguja fina de la masa renal [FNA] y biopsia) y el seguimiento de los parámetros renales, específicamente la SDMA²¹.
• La posibilidad de decidir sobre el uso de determinadas terapias (p. ej., reducción de las dosis de quimioterapia, diuresis simultánea o cambio de protocolos).

Toxicidad farmacológica

La toxicidad farmacológica puede ser aguda (por la ingesta de medicamentos no adecuados para el paciente) o crónica, por la administración regular de determinados tipos de medicamentos para las afecciones concurrentes del paciente²². La medición de la SDMA ofrece una valiosa información para entender la salud del riñón al proporcionar valores de referencia sobre la función y el estado de los riñones durante la administración crónica de algunos medicamentos o sobre los posibles daños agudos causados por una ingesta accidental. Emplear la SDMA como parte de la evaluación del paciente en estas situaciones clínicas puede ayudar a tomar decisiones de intervención y a modificar el tratamiento del paciente a largo plazo.

¿Cuándo deberían los veterinarios realizar una prueba SDMA?

Los riñones son un pilar esencial de la salud sistémica. La enfermedad renal primaria y secundaria puede repercutir en el bienestar del paciente y en su supervivencia. Comprender la función renal permitirá tomar decisiones médicas certeras e informadas. El uso continuado de la SDMA en pacientes sanos y enfermos, junto con otros biomarcadores y el análisis de orina, mejorarán la evaluación de la función renal con el objetivo de proporcionar una mejor atención al paciente y un impacto positivo en su salud a largo plazo.